Este texto está escrito el 20 de septiembre de 2016, doce años después del fallecimiento de Brian Clough. Sobre Clough podríamos hablar durante horas sin perder energía. El icónico entrenador de Middlesbrough dejó momentos imborrables, como sus Copas de Europa con el Nottingham Forest, su destitución en el Derby County y su despido en el Leeds, entre otros. Brian Clough ha sido, es y será uno de los entrenadores más grandes de la historia.
Como jugador, Clough debutó con el Middlesbrough, donde logró un impresionante promedio de 0,92 goles por partido. Su rendimiento con el Boro fue sobresaliente, destacándose como uno de los mejores jugadores de la categoría (Championship). Sin embargo, sorprendió a todos al dejar su equipo natal para firmar con el Sunderland, su principal rival en la región del Riverside Stadium.
Fue entonces cuando comenzó su leyenda en los banquillos. En 1965, el Hartlepool United le contrató como nuevo técnico. Su primera decisión fue incorporar a Paul Taylor como su segundo entrenador, un ex compañero y portero de Clough. En Hartlepool, estuvo dos temporadas, desde 1965 hasta 1967. Tras ese paso, el Derby County se hizo con sus servicios.
En los Rams, Clough estuvo seis temporadas. Poco a poco, fue moldeando un grupo de jóvenes que llevaron al club al ascenso a la primera división. Una vez en la First Division, consiguió un título de liga y llevó al Derby hasta las semifinales de la Copa de Europa en 1972. Sin embargo, sus constantes problemas con la directiva terminaron empujándolo a dejar el club. Esta etapa dejó una de las imágenes más recordadas: en las oficinas del extinto Baseball Ground, Brian Clough y su asistente Peter Taylor aparecieron sentados, esperando su destitución.
En noviembre de 1973, Brian Clough se trasladó al sur de Inglaterra, al Brighton. Sin embargo, su relación con la victoria se vio drásticamente dañada y, al final de su etapa, dejó al equipo en cuarta división. Solo estuvo dos temporadas en el cargo, durante las cuales no dudó en criticar abiertamente a Don Revie, el entonces entrenador del Leeds United. Curiosamente, cuando Revie dejó el Leeds para asumir el mando de la selección inglesa, el club eligió a Clough como su reemplazo. Esta decisión sorprendió a muchos, dado el rechazo público que Clough había mostrado hacia Revie y su equipo. Su presentación en Leeds fue multitudinaria.
Sin embargo, la realidad fue muy distinta. Ningún jugador lo idolatraba. Clough, con métodos muy diferentes a los de Revie, chocó de inmediato con la plantilla del Leeds. Sus constantes comentarios sobre su etapa en Derby County no fueron bien recibidos y, a medida que avanzaba la temporada, la tensión fue insostenible. En su primer partido con el equipo, frente al Liverpool, perdió la Charity Shield, un encuentro que también es recordado por la violenta pelea entre Kevin Keegan y Billy Bremner. La estancia de Clough en Elland Road fue brevísima: 44 días. Se marchó dejando una de las frases más célebres de su carrera: “Hoy es un día triste… para el Leeds United”. Esta historia inspiró la película The Damned United, que es una pieza esencial para cualquier aficionado al fútbol.
Tras su paso por el Leeds, el 6 de enero de 1975, el Nottingham Forest anunció el fichaje de Brian Clough. En su primera temporada con el Forest, Clough asentó las bases para un proyecto con vistas al futuro. En la temporada 1977/78 logró ascender al equipo y, al año siguiente, conquistó la First Division. Su mayor logro llegaría en 1979 y 1980, con la conquista de sendas Copas de Europa, lo que se convirtió en uno de los mayores cuentos de hadas de la historia del fútbol inglés. El resto de su trayectoria es, sin duda, historia viva del deporte.
Clough formó un equipo agresivo, sólido y prácticamente imbatible. Aunque no contaba con grandes estrellas, su trabajo y su capacidad para sacar lo mejor de los jugadores fueron clave para alcanzar semejantes éxitos. En el Nottingham Forest, descubrió a futuros grandes del fútbol como Teddy Sheringham y Roy Keane. Sheringham llegó del Millwall por algo más de un millón de libras, y su posterior venta al Tottenham generó una significativa ganancia para el club. Por su parte, Clough fichó a Roy Keane del Cobh Ramblers, un modesto equipo irlandés, y le enseñó a convertirse en el aguerrido y dominante mediocampista que fue en su carrera.
También tuvo la oportunidad de entrenar a su hijo, Nigel Clough, quien, tras su paso por el Forest, siguió los pasos de su padre y hoy en día es entrenador del Burton Albion. La huella de Brian Clough en el Nottingham Forest y en el fútbol inglés es, sin duda, imborrable.
En 1993, Brian Clough se retiró de los banquillos en el club que más aportó a su carrera, el Nottingham Forest. A partir de ese momento, su vida comenzó a declinar. El alcoholismo, que lo acosó durante años, terminó por destruirlo. El 20 de septiembre de 2004, el mundo del fútbol perdió a una figura clave. Desde 2007, en el enfrentamiento entre Derby County y Nottingham Forest, se celebra el Brian Clough Trophy. Además de los tres puntos, cada equipo se lleva a casa un trofeo en memoria de este técnico legendario.
Brian Clough. Genial, polifacético, leyenda, autoritario, directo, sin florituras ni adornos. Como él mismo decía: “No soy el mejor entrenador, pero estoy en el top one.”
✍️ Pablo Cartas
🗓️ (20/09/2016)
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