Lo que Ryan Giggs, Gary Speed, Ian Rush o Mark Hughes intentaron tantos años ha prosperado y ha dado su fruto. Entre las selecciones que han entrado en la Eurocopa como novatas está Gales. El conjunto del dragón ha conseguido con sus jugadores, y no con Gareth Bale únicamente, una clasificación que esperan aprovechar en su aventura por Francia.
Al pasado Mundial de Brasil no lograron presentarse. Chris Coleman llegaba con el objetivo de hacer un papel digno en la clasificación. Sin embargo, no encontró la clave del buen juego probando diferentes alineaciones. El balance fue pobre: cuatro victorias, un empate y seis derrotas. Entonces el objetivo se fijó en la Eurocopa de 2016, algo, que en principio, sería más asequible para Coleman y sus chicos.
Hasta aquí llegaron con tan solo una derrota, algunos empates y mayoritariamente victorias. Comenzar con siete puntos de nueve posibles siempre da un gran empuje al equipo. Victorias (2-1) ante Andorra y Chipre y empate (0-0) frente a Bosnia-Herzegovina. Luego de tres partidos menores tocaba la prueba de nivel frente a Bélgica en Bruselas. No se pudo romper el empate a cero en un encuentro donde la actuación defensiva de los Dragones fue mejor que la local. Este punto dio un golpe en la mesa y demostró que Gales estaba en serio.
Los resultados siguieron. El partido en Israel se solventó cómodamente con un 0-3 antes de la prueba local ante Bélgica. Coleman acertó al dar libertad a Bale en la delantera, con Robson-Kanu a su lado. La inclusión de tres centrales y dos laterales profundos ayudó a que en las internadas belgas no se encajara un gol. El tanto de Bale sirvió para dar los tres puntos a los Dragones.
Para finalizar restaban cuatro envites. Se solventaron con dos victorias (Chipre y Andorra), un empate en casa (Israel) y una derrota, la única, a domicilio (Bosnia-Herzegovina).
Algo por lo cual se caracteriza Gales es su formación. O mejor dicho sus formaciones. En estos partidos de clasificación los Dragones han llegado a usar varios sistemas de juego: 3-5-2, 4-2-3-1, 4-3-3, 5-4-1 y 4-4-2. En total, cinco formaciones en los partidos de clasificación para la Eurocopa y amistosos entre dichos envites. Con todas estas formaciones siempre se mantiene algo que Coleman lleva por bandera: tener claro a qué hay que jugar. Sin embargo, quizá las numerosas rotaciones de sistema de juego se deban al problema de iniciativa que sufre Gales.
En la portería esta temporada ha surgido un debate que llevaba años esperándose. ¿Sería capaz Danny Ward de poder jugar con Gales de forma regular? La gran actuación del portero en el Aberdeen propició la llamada de Klopp para el Liverpool. Lo más posible será la inclusión de Wayne Hennessey (Crystal Palace) como guardameta titular. Owain Fon-Williams (Inverness) esperará como tercera opción.
- Defensa:
Con las formaciones de tres o cinco defensas se busca algo más de solidez defensiva junto con más profundidad en los laterales. Taylor en la izquierda y Richards o Gunter (con más asiduidad) por la derecha. Los tres son jugadores largos, con bastante recorrido y que guardan el sitio al hipotético compañero que queda por delante de ellos. Con defensa de cinco es usual ver a los carrileros a la altura de los medios defensivos. Con la de tres actúan algo más adelantados. En el centro de la zaga Ashley Williams (capitán), James Chester y Ben Davies suelen ser los integrantes. Dos jugadores corpulentos y otro, lateral izquierdo, que con velocidad es muy útil para marcar a jugadores rápidos. La opción de reserva es la de James Collins.
- Mediocampo:
En el centro del campo se necesitan tres jugadores. La ventaja con la cual cuenta Gales es que la gran mayoría de sus medios se complementan muy bien, es decir, los titulares con los titulares y los suplentes con los suplentes. Como integrantes del once inicial forman Aaron Ramsey, Joe Allen y Joe Ledley. Los tres son jugadores con buen toque, ataque y defensa. Habitualmente, Ledley actúa algo más retrasado.
Como segunda opción están Andy King (campeón con el Leicester en League One, Championship y Premier League), Jonathan Williams y David Vaughan. Y quedan tres jugadores que pueden jugar como mediapuntas o en banda. Ellos son David Edwards (medio ofensivo), David Cotterill (extremo derecho) y George Williams (extremo izquierdo).
- Ataque:
Bale es intocable en la delantera. El galés es el encargado del balón parado, exceptuando saques de esquina. Su potente zancada y velocidad le consagran como uno de los mejores atacantes del mundo. Su acompañante más probable será Hal Robson-Kanu, un delantero de características similares a las de Bale. Coleman también podría apostar por Sam Vokes (16 goles esta temporada en Burnley) y Simon Church (9 dianas esta campaña en MK Dons y Aberdeen).
- Rivales de grupo:
El primer escollo de Gales en la Eurocopa será Eslovaquia. Los de Jan Kozak poseen una buena defensa, sólida, y un mediocentro capaz de resolver partidos. Sin embargo, en la portería y sobre todo en la delantera no poseen tanto potencial. Destacan Marek Hamsik (Nápoles), Martin Skrtel (Liverpool), Juraj Kucka (Milan), Tomas Hubocan (Dinamo Moscú) o Vladimír Weiss (Al-Gharafa).
Para el segundo partido necesitarán competir al máximo nivel. El rival es la favorita del grupo, Inglaterra. Los de Hodgson llegan con algunas dudas y sin terminar de encontrar una buena fórmula de juego. Sufrirán mucho los hombres de Coleman en este choque. Destacan hombres como Jamie Vardy (Leicester), Harry Kane (Tottenham), Dele Alli (Tottenham), Chris Smalling (Manchester United) o Wayne Rooney (Manchester United).
El último encuentro del Grupo B para Gales será ante Rusia. Los de Leonid Slutski cuentan con la sensible baja de Alan Dzagoev. Es muy importante que los delanteros galeses fijen a los centrales rusos para proporcionar una mayor facilidad de cara a puerta. Será también crucial que sus atacante estén en forma, algo de lo cual depende Rusia. Sobresalen hombres como Igor Akinfeev (CSKA Moscú), Igor Denisov (Dinamo Moscú), Oleg Shatov (Dinamo Moscú), Artem Dzyuba (Zenit) o Aleksandr Kokorin (Zenit).
- Presencia histórica:
Algo que de verdad asombraría a todos sería la repetición de la gesta del Mundial de 1958 celebrado en Suecia. Los de Jimmy Murphy y los suyos no encontraron rival hasta los Cuartos de Final, donde se toparon con la que a la postre sería la campeona del mundo, Brasil. Aquello permanece en el recuerdo de todos los galeses.
Sin embargo, a base de trabajo duro y sacrificio los pupilos de Chris Coleman han llegado a participar en su primera Eurocopa, algo inédito en Gales. Y es que ahora toca disfrutar el premio logrado durante meses. Esto que Cymru* ha conseguido toca dedicárselo al hombre que comenzó el camino, Gary Speed.
*Cymru es el nombre de País de Gales en el idioma natal, donde se emplea tanto el idioma local como el inglés.
✍️ Pablo Cartas
🧑💻 Juani Guillem
🗓️ (06/07/2016)