JAMIE VARDY, LA SENSACIÓN DE LA PREMIER

Comparte la esencia BRIT

No tiene la potencia de Rooney, ni la técnica de Agüero. Tampoco la zancada de Diego Costa, ni el remate de Giroud. No posee el talento natural de Kane, ni la versatilidad de Lukaku. Y, sin embargo, en noviembre de 2015, Jamie Vardy es el máximo goleador de la Premier League. Nadie lo habría apostado hace unos años.

Casi nadie habría apostado que Jamie Vardy, a sus 28 años, llegaría a jugar en la Premier League, y mucho menos en la selección absoluta.

El sueño de Vardy siempre fue jugar al fútbol, pero nunca lo tuvo fácil. Criado en un barrio conflictivo de Sheffield, su infancia fue dura. Con un ADN marcado por su carácter rebelde, a menudo llamado “chico malo” o “Chav” por las aficiones rivales, Vardy tiene un pasado con entradas violentas y hasta un arresto domiciliario que lo apartó del fútbol. Su primer equipo fue el Stocksbridge Park Steels F.C., en la octava división inglesa. Allí debutó a los 19 años, mientras trabajaba en una fábrica de férulas médicas.

Me levantaba a las seis de la mañana. Entraba a trabajar a las 7:00 y no salía hasta las cuatro y media de la tarde. Entonces, me venían a buscar algunos compañeros del equipo y me iba a entrenar y no regresaba a casa hasta pasadas las 11 de la noche.

La vida de Vardy entonces era otra. Ganaba poco más de 30 libras semanales gracias al fútbol, muy lejos de las £12,000 que ahora ingresa cada domingo. Aunque aún es uno de los jugadores peor pagados de la Premier League, una renovación cercana duplicará sus ingresos.

Y es que sus comienzos no indicaban un futuro en el fútbol. A los 16 años, el Sheffield Wednesday, su club de toda la vida, lo rechazó por ser demasiado bajo. “Fue el peor momento de mi vida. Era el club que siempre apoyé y, para colmo, en pocas semanas crecí más de 20 centímetros”, cuenta. Fue entonces cuando aceptó que no viviría del balón, se unió al Stocksbridge Park Steels, un equipo cercano a su casa, y pasó por su equipo juvenil hasta que, a los 19 años, subió al primer equipo.

En tres temporadas en la primera plantilla, Vardy anotó 66 goles. En la campaña 2010/11, el Halifax Town, recién refundado en la sexta división, lo fichó. Tras marcar 29 tantos, dio un paso más cuando el Fleetwood Town, de quinta división, lo incorporó. Sus cifras siguieron subiendo, superando los 30 goles, y el fútbol profesional finalmente tocó a su puerta.

El Leicester, que en 2012 luchaba por ascender a la Premier, pagó £1 millón por él, un récord para un jugador no profesional. Así, saltó de golpe tres categorías.

Tuvo que dejar su trabajo en la fábrica y adaptarse a un vestuario completamente nuevo. Era el “raro”, el chico conflictivo de un barrio difícil, el que no podía dejar sus pertenencias a la vista en la taquilla. El “Chav”.

Su inicio fue arrollador: tres goles y tres asistencias en los primeros nueve partidos lo pusieron en el escaparate, hasta que llegó la primera lesión muscular. Una recaída poco después y un mal momento de forma lo dejaron en el banquillo durante el segundo tramo de la temporada, con su autoestima por los suelos y su futuro incierto. Recibió duras críticas por no estar a la altura de un fichaje tan caro, con solo cuatro goles en su cuenta.

“El apoyo de Nigel Pearson y Craig Shakespeare (técnico y asistente) fue crucial. Pero sí, estuve a punto de dejarlo”, reconoció el delantero. No lo hizo, siguió trabajando y comenzó a recoger sus frutos. Un año después, estuvo a la altura de su pasado, anotando 16 goles (además de 10 asistencias) en la 2013/14 y siendo clave en el ascenso del Leicester a la Premier League.

El pasado curso fue extraño, raro y difícil. Con un Leicester sin rumbo durante todo el año, Vardy protagonizó una racha histórica en los últimos tres meses. No solo logró la permanencia, sino que catapultó al club a un nivel inesperado, manteniéndose en puestos de Champions League y a solo tres puntos de la cabeza.

Pero sin duda, hubo un partido que definió a Vardy y lo catapultó a lo que hoy muestra domingo tras domingo. Fue ante el Manchester United, en la 5ª jornada, cuando el delantero, escorado a banda (como gran parte de la campaña, de ahí su bajón goleador), marcó un gol y asistió en los otros cuatro durante la remontada de los Foxes, que vencieron 5-3 al equipo de van Gaal.

Su buen rendimiento en este curso está fuera de duda. Ha dejado la banda y ahora juega como referencia arriba, acompañado de otro delantero (Leonardo Ulloa o Shinji Okazaki), en lo que parece ser su mejor posición.

Vardy es un correcaminos, un luchador nato que no concibe el fútbol sin esfuerzo, y un zorro del área, pues es raro verlo marcar fuera de esa zona. Reina en el caos y cuanto más acelerado esté el partido, mejor es su versión. Por eso, sus segundas partes suelen ser siempre mejores que las primeras, y en esa eterna remontada que el Leicester persigue cada partido, podemos ver a un futbolista desencadenado que nunca olvida de dónde viene.

“El secreto es trabajo y más trabajo, tener motivación y determinación para hacer algo. Y yo estoy haciendo lo que quiero hacer”, admite, y revela que no echa de menos levantarse a las seis de la mañana ni comer en las estaciones de servicio cada día.

Inglaterra ahora tiene una pequeña batalla interna sobre si Vardy debe ser el elegido para representar a los Three Lions en la próxima Eurocopa. El debate radica en si confiar en el chico travieso, canalla, trabajador y conflictivo que ha llegado hasta aquí con 28 años a base de esfuerzo y determinación, o decantarse por opciones más jóvenes y talentosas.

Roy Hodgson ya le ha convocado y, en cuatro ocasiones, ha vestido la camiseta de la selección, aunque sin suerte de cara al gol. De momento, Jamie Vardy trabaja en su equipo para ganarse esa oportunidad con la selección. Marca cada 89 minutos, una cifra difícilmente superable en las grandes ligas, y se postula como candidato a la Bota de Oro, lista en la que ya asoma la cabeza. No tiene rival en la lucha por el pichichi. Y no parece dispuesto a permitir que nadie se le acerque.

✍️ Diego García Argota

💻 Juani Guillem

🗓️ (05/11/2015)

The following two tabs change content below.

Redacción Premier League

Nuestro rincón de la mejor liga del mundo. Iluminados por las luces de la Premier League. Los mejores, en un solo lugar.

Entradas relacionadas

Deja tu comentario