La brecha entre la Premier League y Championship sigue creciendo cada temporada. Este año, a pesar de las deducciones de puntos a equipos como Nottingham Forest y Everton, los tres clubes recién ascendidos -Burnley, Sheffield United y Luton- son los que ocupan los tres puestos de descenso. La diferencia entre ambas categorías se vuelve más evidente, y el desafío para los equipos recién ascendidos es cada vez mayor.
El mundo del fútbol se encuentra ante una encrucijada. Las instituciones organizadoras han identificado que la brecha entre el primer nivel de clubes y el resto sigue aumentando. Esto afecta negativamente la competitividad y la espectacularidad del juego, ya que los mismos equipos ganan y pierden constantemente. Sin embargo, las políticas implementadas parecen agravar el problema. Los grandes clubes exigen más poder, y FIFA, UEFA y las federaciones ceden ante esas demandas, profundizando la desigualdad en el deporte.
Inglaterra, frecuentemente vista como el último bastión del fútbol más equitativo y puro, ya no escapa a la creciente brecha. Lo que empezó como una pequeña diferencia, se convirtió en un socavón. Ahora, parece encaminarse a transformarse en una falla. Aunque hay varios factores que contribuyen a este fenómeno, el principal tiene que ver con la llegada de capital extranjero. Actualmente, solo Brentford, Brighton, Tottenham y Crystal Palace cuentan con propietarios ingleses. Además, la Premier League ha prestado poca atención a quiénes son esas personas, a veces incluso Estados, que invierten en su liga. La diferencia económica entre la primera y segunda división es ahora abismal.
Ser un “equipazo” en Championship ya no garantiza mantener el nivel en la Premier League al año siguiente. Un claro ejemplo de esto es el Burnley de Vincent Kompany. Los Clarets rompieron todos los récords en la temporada 2022/23, dominando la liga y logrando el ascenso más temprano en la historia de la competición. Sin embargo, su regreso a la Premier League ha sido complicado, con el equipo atrapado en la zona roja de la tabla. Lo mismo sucede con Sheffield United y Luton Town. Ambos ascendieron la temporada pasada, pero si no ocurre algo sorprendente, parece que están destinados a regresar a la segunda división.
- ᴜɴ ꜱᴜᴄᴇꜱᴏ ʀᴇᴄᴜʀʀᴇɴᴛᴇ
Lo de este año es el culmen de una tendencia que no es nueva. En las últimas cuatro temporadas, cinco de los doce equipos recién ascendidos descendieron al año siguiente, mientras que solo cuatro han logrado mantenerse en la Premier League hasta el día de hoy. Los equipos que ascienden se ven obligados a reforzarse para competir al más alto nivel, pero muchas veces el exceso de fichajes termina siendo contraproducente. Un claro ejemplo de esto fue el Fulham. El equipo londinense gastó más de cien millones tras su ascenso en la temporada 2019/20, pero no logró mantenerse en la Premier League.
En este contexto, ha surgido una especie de subcategoría de equipos que son muy fuertes en Championship pero se muestran muy débiles en Premier League, lo que crea un ciclo continuo de ascensos y descensos. Equipos como Fulham, Watford, West Brom, Norwich, Sheffield United o Burnley han demostrado ser auténticos “equipos ascensor”. Es mucho más raro ver a otros clubes como Luton Town colarse entre los ascendidos.
Además, los equipos recién descendidos cuentan con la ayuda económica de los llamados ‘parachute payments’ durante las tres temporadas siguientes a su descenso. Esta compensación les ayuda a paliar el golpe económico y, de alguna manera, los “dopados” respecto a sus competidores, lo que les otorga una ventaja significativa en su lucha por el regreso a la Premier League.
Inglaterra debe reflexionar profundamente sobre esta situación. La introducción del regulador independiente en la Premier League la próxima temporada podría ser una herramienta clave para evitar que ciertos equipos estén financieramente “dopados” y asegurar que todos los clubes compitan con las mismas condiciones. Como cuna del fútbol, el país no puede permitirse una brecha definitiva entre la Football League y la Premier League. Es fundamental que se mantenga la esencia competitiva y equitativa del juego, sin que los recursos económicos se conviertan en un factor determinante para el éxito.
- ᴇʟ ᴘᴀʀᴛɪᴅᴏ ᴅᴇ ʟᴏꜱ ᴍɪʟʟᴏɴᴇꜱ
La final del play-off de Championship en Wembley no es solo un partido, es el encuentro de mayor importancia económica en el fútbol mundial. Aunque sea parte de la segunda división inglesa, el premio para el equipo ganador es un lugar en la Premier League, lo que abre la puerta a un sinfín de beneficios financieros.
Para ilustrarlo, antes de la final del play-off de 2020 entre Brentford y Fulham, la firma Deloitte estimó que el club que lograra el ascenso podría generar entre £135 y £265 millones, dependiendo de si lograban o no evitar el descenso inmediato de la Premier League. Este tipo de cifras demuestra la magnitud económica que está en juego y cómo este partido representa más que solo un trofeo, sino una oportunidad para cambiar el destino de un club.
Efectivamente, esa inyección económica es crucial para un equipo recién ascendido. El dinero no solo sirve para garantizar una mayor competitividad, sino que se vuelve prácticamente una obligación. La brecha entre la Premier League y Championship es tan abismal que, para siquiera intentar mantenerse en la élite, un equipo tiene que elevar drásticamente el nivel de su plantilla, lo que a menudo implica hacer cambios significativos en todos los aspectos del club. Desde fichajes de calidad para afrontar la exigencia de la liga hasta mejorar la infraestructura y el cuerpo técnico.
Aunque esa inversión puede ser necesaria, no garantiza el éxito. Muchos equipos se han visto atrapados en el ciclo de gastar, ascender, descender y volver a gastar, sin poder estabilizarse. Sin embargo, en un mercado tan competitivo, la alternativa de no hacerlo puede significar regresar rápidamente a Championship, con todas las implicaciones financieras y deportivas que esto conlleva.
El caso del Nottingham Forest es un claro ejemplo de cómo la presión por mantenerse en la Premier League puede llevar a decisiones extremas. Con 21 fichajes, el club intentó fortalecer su plantilla de inmediato. Buscó equilibrar experiencia y talento joven para competir al máximo nivel. Sin embargo, la química entre los jugadores, la adaptación a la Premier League y la integración del cuerpo técnico no fueron suficientes. Esto resultó en una lucha constante por la permanencia.
A pesar de la enorme inversión y los numerosos fichajes, el Forest terminó en la zona baja de la tabla, lo que demuestra lo difícil que es mantenerse en la élite, incluso con un gran gasto en el mercado de transferencias. Este caso también subraya la incertidumbre del retorno de esa inversión. El dinero invertido no siempre se traduce en resultados. Encontrar un balance adecuado entre fichajes y cohesión grupal es esencial para evitar el descenso.
La sanción de cuatro puntos al Nottingham Forest en 2024 resalta las dificultades financieras que enfrentan los clubes recién ascendidos en la Premier League. El club superó el límite de pérdidas permitido, lo que resultó en una penalización que complicó su lucha por la permanencia. Con un ambicioso proyecto de fichajes tras su ascenso, el Forest invirtió grandes sumas en jugadores. Sin embargo, esa estrategia también lo llevó a una situación financiera complicada.
El gasto de 300 millones de euros en fichajes y la llegada de 42 jugadores demuestran la presión por adaptarse a la élite. Esto subraya el costo de mantenerse competitivo en un entorno de disparidad económica. Las sanciones financieras y la deuda por superar los límites impuestos, junto con la dificultad de lograr cohesión en un plantel tan nuevo, evidencian lo complejo que es para los clubes recién ascendidos sobrevivir en la Premier League. Este caso refleja cómo la brecha económica entre la primera y segunda división de Inglaterra se amplía, forzando a los equipos a asumir riesgos financieros mayores.
- ᴇʟ ᴅᴇꜱᴄᴇɴꜱᴏ ᴇꜱ ʙʀᴜᴛᴀʟ ʏ ɢᴇɴᴇʀᴀ ᴅᴇꜱɪɢᴜᴀʟᴅᴀᴅ
El descenso a la Championship es, sin duda, uno de los momentos más difíciles para un club. La caída del ‘mundo Premier’ genera una sensación de vacío, ya que el club se ve obligado a adaptarse a una nueva realidad. En este escenario, los equipos que descienden reciben los ya mencionados ‘parachute payments’ o ‘pagos paracaídas’, una ayuda financiera crucial que mitiga el golpe económico al proporcionar un porcentaje de los ingresos por retransmisiones televisivas. Este sistema está diseñado para frenar la caída y facilitar la transición, pero no es una solución definitiva.
Los pagos, aunque útiles, disminuyen progresivamente durante tres años: del 55% al 45% en el segundo año, y si el club estuvo más de una temporada en la Premier League, baja al 20% en el tercer año. Aunque estos pagos permiten a los clubes mantenerse competitivos en la Championship, también generan una brecha económica entre los equipos descendidos y los que están en el segundo nivel. Aquellos que reciben esta ayuda tienen una ventaja sobre los que no la reciben, creando una dinámica desigual en la lucha por el ascenso.
- ᴇɴ ꜱᴇɢᴜɴᴅᴀ, ᴄᴏᴍᴏ ᴇɴ ᴘʀɪᴍᴇʀᴀ
La Championship, aunque es una de las competiciones más relevantes del fútbol mundial, ocupa una posición intermedia entre la élite y el resto del fútbol profesional. Con una riqueza considerable, es la novena liga más rica de Europa y la duodécima en cuanto a asistencia global. Además, es la segunda liga de segunda división más vista del mundo, solo detrás de la 2. Bundesliga alemana, lo que refleja su enorme atracción tanto en términos de audiencia como de inversión.
Sin embargo, el gran problema es la creciente brecha con la Premier League. A pesar de la prominencia y competitividad de la Championship, los recursos financieros, infraestructuras e inversiones de los clubes de la Premier siguen ampliando la distancia. Los equipos de Championship luchan por mantenerse competitivos, y el esfuerzo por ascender a la Premier, cada vez más costoso, refleja la creciente dificultad para cerrar esa brecha. La dinámica económica actual pone a los clubes de la Championship en desventaja frente a los de la Premier, creando un ciclo que hace cada vez más difícil para los ascendidos mantenerse competitivos en la máxima categoría.
🗓️ (02/05/2024)
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