El fútbol no le da respiro. Por quinta temporada consecutiva, el Fulham encadena ascenso, descenso, ascenso, descenso, ascenso. Los resultados marcan que el estadio con más encanto de la capital sea, en las últimas campañas, un ascensor de emociones. Un equipo al que le queda pequeña la Championship, pero no puede hacer pie en la Premier League. Una situación que se personifica en la figura de Mitrović: pichichi, historia y leyenda del club, con una actuación individual que difícilmente se repita.
El Fulham ha regresado a la Premier League. Lo hace como campeón de Championship y apoyado en la figura de Aleksandar Mitrović como máximo representante del club. El serbio ha escrito un capítulo dorado en las páginas de historia del campeonato al convertirse en el jugador que más goles ha marcado en una sola temporada: ¡43! superando los 42 tantos que en su día (hace 30 años) hizo Guy Whittingham y que parecía una cifra imposible de alcanzar en nuestros días. A los 43 goles hay que sumar siete asistencias repartidas. Es decir, ha generado 50 goles en 43 partidos jugados, más que 35 de los 97 equipos que compiten en las cuatro divisiones profesionales del fútbol inglés.
El equipo de Shahid Kahn, dirigido por Marco Silva, ha dominado la categoría con mano de hierro desde que se apagó el semáforo hasta la línea de cuadros. Los Cottagers llevan más de 20 jornadas seguidas en la cabeza y solo en una ocasión han estado fuera de los puestos de ascenso o promoción, y fue tras pinchar en la jornada inaugural del campeonato.
Sostenido siempre por Mitrović (ya nombrado Player of the Season) como jugador referencia, las aportaciones de futbolistas experimentados como Reed, Seri, Ream o Cairney, estos tres últimos con amplia trayectoria en el club, han traído una solidez al equipo que se ha terminado de macerar gracias a las aportaciones de otros más jóvenes y prometedores, resaltando la figura de un Fábio Carvalho que ha superado la decena de goles y que apunta claramente al Young Player of the Season.
Ahora, toca un paso aún más difícil. Mantenerse en la máxima categoría. El Fulham le ha cogido el tranquillo a ascender el mismo año que baja a Championship, pero no ha sido capaz de dar con la tecla de conseguir la permanencia una vez ha vuelto a la máxima división. Además, ni en la temporada 2018/2019, ni en la 2020/2021 pudieron hacer frente a la situación, pues descendieron semanas antes del fin del campeonato y acabaron a 10 y 11 puntos de la permanencia respectivamente.
El Fulham no ha sido capaz de demostrar ese juego atrevido y dominador en Premier League que sí le ha valido en Championship. Muestra de ello es que su mejor jugador, Mitrović, luce en segunda, pero no en primera. Y, de hecho, pese a ser el fichaje más caro de su historia, el jugador diferencial y la referencia del equipo, Scott Parker se atrevió a sentarle durante varios tramos de la última temporada del club en Premier. El serbio solo ha sido capaz de hacer 14 goles en dos temporadas en Premier League con los Cottagers, por los 81 que ha logrado en dos campañas y media en Championship con la camiseta del Fulham. Un salvavidas.
Jokanović no supo adaptarse a la máxima categoría. Tampoco Scott Parker y nunca funcionó la intentona con Claudio Ranieri. Ahora, es el turno de Marco Silva, deseoso de una nueva oportunidad en Premier después de hacerlo bastante bien con el Watford, pero de ser despedido del Everton antes de cumplir seis meses a los mandos del club, en 2019.
El dinero que asegura la presencia en la mejor liga del mundo invita a pensar que el Fulham no escatimará para hacer fichajes. Ya lo hizo hace un par de años, pagando unos 40 millones de euros en nuevos futbolistas, pero sobre todo hace cuatro años cuando el dueño no dudó en invertir más de 100 millones en altas que no terminaron de carburar. Ahora, no se trata solo de derrochar, sino de reforzar lo necesario y dar con la tecla para volver a colocar entre los grandes a un Fulham que hace solo 12 años estaba jugando una final de Europa League.
🗓️ (06/05/2022)
Redacción Ligas Menores
