Islandia llegó al juego con Inglaterra bajo la idea de hacer lo mejor posible, pero se pasaron, y sus modestas expectativas se transformaron en una dulce realidad.
Inglaterra se adelantó a los cuatro minutos de juego, con un tiro de penal de Wayne Rooney. La falta fue de Halldórsson a Sterling. El delantero del Manchester City ya no tenía opciones para anotar, pero el árbitro, Damir Skomina, lo pitó.
Un minuto después, Ragnar Sigurðsson empató tras zafarse de la marca de Danny Rose, en un centro del conjunto islandés. El escandinavo aprovechó para batir de derecha a Joe Hart, que se vio sorprendido tras la pésima marca de los suyos en el área. Tremenda reacción de los de Lagerbäck.
Así, los primeros diez minutos fueron, pese a todo, muy buenos en lo anímico para los islandeses, que recurrían a la premisa de alto orden y fuerza en la marca.
Luego, Islandia, con su segundo tiro al arco, volvió a golpear. Sigþórsson la hundió en la meta inglesa, con complicidad de Hart, que fue muy mal abajo. Culpa de Smalling y Cahill de dejar tirar al delantero (ex Ajax). Esto ocurrió a los 18 minutos de juego.
Islandia tenía un elemento a su favor. Uno diferenciador. Uno que le permitió, por supuesto, tomar la ventaja ante su rival: las ganas.
Una volea de Kane hizo emplearse a fondo a Halldórsson, que tapó con una mano un auténtico misil del delantero del Tottenham, que hasta ese momento lucía muy estático.
Hasta el minuto 40, Inglaterra lo intentó con tiros de larga distancia y balones filtrados. Ninguna de dichas opciones fueron ejecutadas con precisión. Rose fue muy castigado por la defensa islandesa, que lo bajaba una y otra vez en cada internada sobre la banda izquierda.
Antes del descanso, todos los integrantes del banquillo inglés se levantaron a calentar para ponerse a punto y salir al segundo tiempo con el cuchillo entre los dientes.
- Último llamado:
En Inglaterra hubo apenas un cambio. Wilshere por Eric Dier. Todo en busca de dar más poder ofensivo, aunque con el poco brillo que tuvo hasta el momento, se le presentaba uno de los mayores retos de su vida. Y de paso, callar bocas.
Inglaterra seguía insistiendo por el lado de Rose, que tenía más valentía y criterio para avanzar desde su costado. Sterling y Kane no gozaban de la conexión necesaria. Y Sturridge se hacía bolas por tratar de hacer su jugada individual.
Sigþórsson se mandó una chilena a los 55 minutos y Hart despejó tibio con una mano y parado. Islandia, tras la salida de Dier, adelantó líneas y aprovechó el pobre juego aéreo y físico de Wilshere, quien se convertía en escudero de la defensa, pero más adelantado.
Vardy entró al minuto 60 para darle frescura a la delantera inglesa, que lucía muy parca, y con poco mordiente.
Con un primitivo, escandinavo y cavernario grito de “Uh, uh, uh”, la hinchada vikinga se imponía en las gradas ante el precario y profundo silencio de los ingleses, que lucían tremendamente desconcertados.
Ningún tiro de larga distancia inquietó a Halldórsson. Ni Wilshere, ni Kane. Dejaron de insistir con esa variante, y eligieron dar a Vardy altos y espesos pelotazos largos. Rooney, sin duda, tuvo un pésimo juego. Cada pelotazo que lanzó fue pasado o a las manos del arquero.
Sæversson intentó con un zurdazo alto. La primera llegada islandesa en el segundo tiempo se dio al minuto 73. Inglaterra no encontró la manera de generar con paciencia y coherencia jugadas en ofensiva.
En los últimos 10 minutos, Inglaterra aceleró con un poco más de acierto. Ingresó Rashford para intentar anotar el empate. Una locura. Inglaterra se estaba quedando sin nada. Así Islandia soportó los minutos agregados con gran orden y dejó afuera a Inglaterra, que deberá renovar más sus cartas de cara a Rusia 2018. Islandia, en tanto, se medirá a Francia en los cuartos de final de la Euro.
Brexit de la Euro 2016. ¿Seguirá Gales? Los Dragones, después de la invasión de las islas, son los únicos sobrevivientes en la competición europea. ¡Áfram Ísland!
✍️ Robbie Ruud
🧑💻 Juani Guillem
🗓️ (27/06/2016)
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